Hola chicas!!
¿Me vais a permitir un post de reflexión?
Hay etapas en la vida de cada uno en la que surgen oportunidades que nos ponen en una disyuntiva, se trata de estar en una continua elección, aprender a decir que no muchas veces, renunciar a muchas cosas que en ocasiones nos hacen pensar que estamos desperdiciando oportunidades.
Mis últimos dos años han sido así, un periodo de sacrificio y renuncias que por fin ha terminado: renuncia a estar con la familia, renuncia a estar con los amigos, sacrificio de hobbies (entre ellos el blog), sacrificio de vida social e incluso vacaciones en pareja.
Hay proyectos que nos absorben de tal manera que nos obligan a plantearnos la necesidad de alejarnos de todo para centrarnos en ello. Lo más importante es saber valorar lo que hemos aprendido de esa etapa aunque el proyecto no tenga un final feliz.
También hay que saber a qué renunciar, he aprendido de lo que no se puede prescindir: son las relaciones personales, ya sea con familia o amigos. Hay mil maneras de continuar el contacto y quienes te quieran entenderán el proceso que estas atravesando. En mi caso, pude organizarme las visitas familiares, quizá más cortas que habitualmente pero sin prescindir de ellas; y con los amigos mantenía contacto por teléfono y alguna salida puntual… Esto es un gran apunte, nunca sabes quién está a tu lado de verdad hasta que no atraviesas una situación de este estilo.
Me he dado cuenta que, amigos que yo sentía muy cercanos, ni se han molestado en reparar en mí en todo este tiempo, por la sencilla razón que ya no salía tan a menudo como antes. En cambio, otros lo han entendido perfectamente y han tenido mensajes de apoyo y la paciencia suficiente para esperar mis tardías respuestas.
De todo aquello que emprendemos debemos valorar lo positivo, lo que hemos aprendido… en mi caso me he conocido más a mí misma, he encontrado una fuerza de voluntad y una perseverancia que desconocía tener, he descubierto quien me quiere de verdad y valora mi amistad, y también he aprendido a valorar lo que tengo y a estar a gusto con ello.
Mi futuro está lleno de proyectos, no concibo el fracaso, si no un cambio en mi vida que, quizá no me estaba planteando de la manera adecuada, y que empiezo a construir poquito a poco.
Nunca os deis por vencidos, cualquier sueño que tengáis se puede hacer realidad, yo estoy empezando a creerlo.
Gracias a las que habéis estado conmigo este tiempo ( a pesar de estar poco activa) y a todos los que seguís conmigo en este viaje
Mil Besitos!!!
Me ha gustado mucho tu post: es realista, pero mantiene la positividad y eso me encanta. Yo he sido opositora y sé de lo que hablas. Y cuando estaba criando a mis dos niñas, de bebés, también tuve que renunciar a muchas cosas, pero eso se hace de mejor grado (a pesar de que también conozco gente a quien le viene grande la maternidad y anda todo el día quejándose, jajaja).
ResponderEliminarUn besazo y a seguir hacia adelante!
Todo te enseña.
ResponderEliminarAfortunadamente, esos periodos tan duros son muy buenos para aprender no sólo qué tienes o qué no, sino qué es lo que realmente te importa, quien eres tú, y a quien quieres en tu vida.
Besos!
Si tienes teson en conseguirlo se consigue!!besos
ResponderEliminarhola guapa, me ha gustado mucho el post, me he sentido identificaa, aunque no por los mismos motivos, pero yo estoy pasando una etapa muy dificil en mi vida, donde me veo un poco estancada y tambien con miedo a los cambios, y ves realmente quien esta ahi y quien no y te llevas bastante decepciones, pero como dices, te conoces más a ti misma y aprendes a ver y valorar las cosas de otra manera.
ResponderEliminarMe quedo con la ultima frase, no darme por vencida, y seguir luchando y seguir intentandolo
gracias
Hola Esther, tienes mucha razón en tus palabras. Todo requiere un esfuerzo, y tarde o temprano todo esfuerzo tiene su recompensa.La gente que realmente vale la pena siempre estará ahí, y el resto, los que se van quedando por el camino, es que no valían la pena.
ResponderEliminarBesos y , como bien dices, nunca hay que darnos por vencidos.
Mucha razón en lo que dices... Uno se da cuenta de quién está ahí realmente, y quien no, cuando atraviesa temporadas en las que no puede o no le sale del alma salir más y entonces es el momento de recibir en lugar de dar... y te das cuenta de que estabas dando a quien no lo merecía.
ResponderEliminarBesos y ánimo!
Lo importante es tener motivaciones, unos planes salen otros no, pero la vida es así, si todo fuera perfecto no tendría encanto. Un abrazo!
ResponderEliminarEs así, en los periodos complicados en los que no hay tanto tiempo como antes ni tantas salidas de ocio es cuando de verdad nos damos cuenta de quién está a nuestro lado. Y desgraciadamente es menos gente de la que aparece en las redes sociales... ¡muchos besos!
ResponderEliminar¡Buena reflexión, guapa! Te entiendo perfectamente. Apenas llevo dos meses preparando mis opos y ya he dejado (o me han dejado) atrás. Alucinante. Un besote
ResponderEliminarEl 2017 está a la vuelta de la esquina, así que es un buen momento para dejar atrás lo que ya no te aporta o no te enriquece. Suerte con tus proyectos ;)
ResponderEliminaryo estoy en uno de esos periodos de estar tan completa de cosas que no puedo quedar y hay gente que no lo entiende
ResponderEliminarExacto, como dice Miss Potingues, todo enseña. Yo viví unos años terribles, llenos de privaciones, en una ciudad que me hizo polvo y lejos de mis seres queridos. Y todo para qué? Pues para nada. Sólo que en mi mente inmadura tenía el pensamiento de que en la vida se ha de sufrir para conseguir cosas. Pero me di cuenta de que el sufrimiento sin más no lleva a nada. Un abrazo guapa!!
ResponderEliminarMucho ánimo, yo estoy atravesando una racha en la que ni para atrás ni para adelante, parece que no veo la luz, un besote.
ResponderEliminarDont stop believing my darling! Besotes!
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